domingo, 30 de agosto de 2009

"Te he hecho a Tí..."


Queridos hermanos les comparto una pequeña fábula espero les guste y sea de reflexión.

El zorro mutilado.

Un hombre que paseaba por el bosque vio un zorro que habia perdido sus patas, por lo que el hombre se preguntaba cómo podría sobrevivir. Entonces vio llegar a un tigre que llevaba una presa en su boca. El tigre ya se habia hartado y dejó el resto de la carne para el zorro.

Al día siguiente Dios volvio a alimentar al zorro por medio del mismo tigre. El comenzó a maravillarse de la inmensa bondad de Dios y se dijo a sí mismo: "voy también yo a quedarme en un rincón, confiando plenamente en el Señor, y éste me dará lo que necesito".

Así lo hizo durante muchos días; pero no sucedía nada y el pobre hombre estaba casi a las puertas de la muerte cuando oyó una voz que le decía: "¡Oh tú, que te hallas en la senda del error, abre tus ojos a la verdad!. Sigue el ejemplo del tigre y deja ya de imitar al pobre zorro mutilado".

Por la calle vi a una niña aterida y tiritando de frío dentro de su ligero vestidito y con pocas perspectivas de conseguir una comida decente. Me encolericé y le dije a Dios : " ¿Por qué permites estas cosas? ¿Por qué no haces nada para solucionarlo?"

Durante un rato, Dios guardó silencio. Pero aquella noche, de improviso, me respondió: "Ciertamente que he hecho algo. Te he hecho a tí"

+Antony de Mello

Si acoges la causa de Cristo y la misión que el te confía, toda la familia humana y la Iglesia en todas las partes del mundo podran mirar el futuro con esperanza y confianza, sobre todo vista desde la fé en que solo en Cristo somos verdaderamente libres.

2 comentarios:

  1. me encantaria meterme a cura pero me da muchisimo muiedo de lo que me pueda encontrar

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    1. Si tu vocación es verdadera, independientemente de lo que se pueda uno encontrar podrás encontrar a Dios en todo rostro que mires, aún en la injusticia siempre podemos hacer la diferencia, aceptar el llamado es confiar infinitamente en nuestro Señor, seguros de que el nos enseñará siempre a llevar el yugo y a ser felices en nuestra vocación. Seguir a Dios es ganarlo todo. Queda con Dios.

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